Los microscopios digitales con interfaz USB y posibilidades de conexión a la cámara y al PC se utilizan ampliamente en muchos sectores. Los talleres están equipados con una amplia variedad de herramientas. Ahora bien, el microscopio para taller es una herramienta indispensable que puede ser utilizada para numerosas tareas. Los microscopios modernos son relativamente pequeños y muy cómodos de usar. Algunos accesorios permiten el microscopio de forma muy estable sobre una mesa. Esto no sólo permite la propia tarea en sí, sino que también ofrece la posibilidad de mostrar todo el proceso en un monitor o pantalla de ordenador a un mayor número de personas. Un microscopio es usado no sólo por los laboratorios industriales, médicos, bioquímicos o de enseñanza, sino también diversos talleres lo utilizan; no sólo para la investigación y la prestación de sus servicios, sino también con fines de demostración y capacitación. El microscopio con brazo flexible y con conexión a una pantalla externa es muy útil para talleres pequeño y especializados en diversas reparaciones pequeñas o muy grandes, para centros de servicios profesionales, para talleres de joyería o relojería y cualquier otro sector que requiera un examen preciso y exacto y, si es necesario, una reparación. Todo el proceso puede ser documentado para su posterior procesamiento y análisis (imágenes de alta calidad). Gracias a la regulación de la intensidad luminosa del objeto a examinar y el ajuste del zoom, el microscopio de taller puede detectar los más pequeños defectos y daños invisibles al ojo humano, o facilitar procesos como la soldadura. Puede medir y almacenar la distancia del objeto a examinar al microscopio, así como el ángulo y el tamaño. En caso necesario puede transferir los datos del microscopio para taller a un ordenador e incluso imprimirlos (por ejemplo, para el cliente).